CASTELLDEFELS
el piso al dafna de la muntanyeta
Hacer el retrato de una ciudad es el trabajo de una vida y ninguna foto es suficiente, porque la ciudad está cambiando siempre. Todo lo que hay en la ciudad es parte de su historia: su cuerpo físico de ladrillo, piedra, acero, vidrio, madera, como su actitud vital de hombres y mujeres que viven y respiran. Las calles, los paisaje, la comedia, la riqueza, los comerciantes, todo un mundo que respira y que se interrelaciona entre sí. El piso AL DAFNA DE LA MUNTANYETA nos ofrece ubicación donde disfrutar de la vida de nuestra ciudad. Con 92 m² se nos presenta como el piso ideal. Pasamos para adentro. El recibidor nos acoge y nos distribuye el piso. Conocemos el salón. Antesala del descanso, con 28m²es el lugar de participación y comunicación familiar. Desde mi terraza veo el centro, veo las vidas de quienes degustan un café hablando y resolviendo su ciudad, nuestra ciudad. Son dos terrazas, una de siete metros y otra de nueve metros orientadas a la vida que nos rodea. Conocemos las habitaciones. Tres momentos privados de esparcimiento y sueño de los cuales tres son de gran tamaño. La cocina es quizás uno de los elementos más importantes. Zona de conversaciones entre fogones, llamadas al lado de una taza de té o mientras comemos unos cruasanes recién comprados en la panadería de la esquina. Por cierto, el parking hace que no te tengas que preocupar dónde aparcar un coche grande. Es mucho mejor hacer los recados caminando. El piso AL DAFNA DE LA MUNTANYETA nos retrata y nos ofrece a participar de la vida de nuestra ciudad, de nuestras gentes, de sus comerciantes, a veces irritantes, muchas veces sonrientes.